Hay una experiencia que pone fin a toda incertidumbre y a toda pregunta. La experiencia del Amor es de Inspiración Divina e inmutablemente Eterna. El amor no va ni viene, no sale ni se pone como el sol, ni brilla intensamente sólo para después empañarse y desaparecer por un tiempo. El amor no es personal o específico. Es imposible Amar algo específico, ya que el Amor es Total y no distingue partes. El Amor no tiene opuesto, dado que es Todo lo que Dios crea para siempre. La mente Divina es Dios, es Amor, eres Tú, es Todo.

Nunca puedes olvidarte o separarte del Amor. Las Ilusiones inevitablemente se desvanecen, pero el Amor permanece Eterno y sigue extendiéndose continuamente para siempre. El Amor todo lo abarca y no puede ser limitado. Puede parecer que el Amor ha sido olvidado o que está temporariamente oculto a la conciencia por la creencia en el tiempo lineal, pero el Instante Santo del Amor es siempre ahora y está siempre presente.

Dios es Amor. Dios, al Ser Amor, es Uno y Abstracto. Dios, al Ser Amor, no toma diferentes formas o viene en diferentes grados o gradaciones. En este mundo parece haber muchos pensamientos, emociones y percepciones que ocultan la conciencia del Amor. Sin embargo son meras tentaciones para olvidar que el Amor es lo único que Existe. Siempre que surja la tentación de negar el Amor, recuérdate que Tú eres Amor y Dios es Amor y nada puede separar la unicidad del Amor de Dios.

Dios, al Ser Amor, no tiene opuestos. Dios es Omnisciente, Todopoderoso y Todo Amor. Las ilusiones que se exponen al Amor deben desaparecer, tal como la oscuridad se desvanece en Presencia de la Luz. El Amor lo es Todo ya que Dios lo es Todo. Dios, al Ser Amor, no tiene nada que ver con el miedo. Dios, Al Ser Amor, no tiene nada que ver con la enfermedad, la depresión, el dolor, la tristeza o cualquiera de las formas que el miedo parece tomar. Puede parecer que la ilusión del tiempo oculta el Rostro del Amor, pero el Amor permanece intacto. El Amor sólo puede ser Lo que Es, y sólo se conoce a Si mismo. El amor y el miedo, Dios y el mundo, no tienen punto de encuentro. La conciencia del Uno implica la inexistencia del otro. Los cinco sentidos del cuerpo parecen engañarnos por un tiempo, pero el Amor se nos revela como Uno y como Totalidad por medio de la Visión Interior que el mundo desconoce. Ora con sinceridad y haz que tu oración sea un deseo unificado de Amor, de Dios. La Visión Interna va a conducirte al recuerdo del Amor que Eres y que Es Dios, un Amor sin opuesto.

El Ego es una fantasía. ¿Acaso puede ser real una fantasía si únicamente el Amor es real? El ego es opinión. ¿Puede el Amor eterno, incondicional, saber de opiniones? El ego es falsedad. Al ser verdadero, ¿puede el Amor tener conciencia de la falsedad? El Amor es verdadero y real y sólo el amor es verdadero y real. El Amor es Uno y por lo tanto está más allá de la posibilidad de comparaciones o acuerdos. ¿Qué puede tener que ver la creencia en la dualidad, en el pasado y el futuro, con el Amor Eterno? Y que podría separar al Amor, que es por siempre Uno?

El Amor se extiende a sí mismo, al Ser Lo que Es. El Amor se extiende a todo. Al extenderse, el Amor sigue siendo amoroso, ya que el Amor permanece como Lo que Es. No hay pérdida ni ganancia en el Amor, porque el Amor carece completamente de límites. Conocer el Amor es conocer la compleción y la plenitud. ¿Cómo podría la Totalidad comprender acaso algo que no fuera Ella misma? ¿Y qué podría “necesitar” el Amor, que ya Lo Es Todo para siempre?

No cuestiones el Amor. Si crees en cuestionamientos, cuestiona todo lo que parece ser “no amor” y está dispuesto a aceptar únicamente Lo que Es Eternamente Verdadero. ¡Haz que la espera termine ya! Acepta ahora el Amor Eterno de Dios. ¿Qué más podría ser más digno de tu aceptación? No hay nada que buscar y nada que encontrar, sólo Todo que aceptar ahora mismo. Soy Amor. Tal es la Verdad. ¡Te damos gracias, Dios, por la simplicidad de la unicidad! ¡Gracias Dios por Ser Amor y por extender el Amor para siempre!

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